SABIDURÍA 15 - La Biblia Hispanoamericana (Traducción Interconfesional, versión hispanoamericana)

Israel quiere permanecer fiel

1Pero tú, oh Dios nuestro, eres fiel y bondadoso,

eres paciente y lo administras todo con misericordia.

2Aun cuando seamos pecadores, te pertenecemos

y reconocemos tu poder soberano.

No queremos pecar, pues sabemos que somos tuyos.

3Conocerte a ti es justicia consumada,

reconocer tu soberanía es fuente de inmortalidad.

4No nos han extraviado los perversos artificios humanos,

ni la obra sin utilidad de los pintores:

esas imágenes cubiertas de colores variados

5que los necios contemplan apasionadamente,

hasta el punto de entusiasmarse

con la imagen inanimada de un ídolo sin vida.

6Quienes fabrican esas imágenes

se entusiasman con ellas y las veneran;

se han convertido en amantes de la maldad

al cifrar en ellas su esperanza.

Insensatez de los fabricantes de ídolos

7Miren al alfarero: con qué mimo da forma a la arcilla

y modela cada uno de los objetos que utilizamos.

La misma arcilla le sirve por igual para modelar

objetos que serán destinados a usos nobles

y objetos reservados a usos contrarios;

el propio alfarero decide la función de cada uno.

8Después, con un esfuerzo digno de mejor causa,

se vale de la misma arcilla para modelar un falso dios.

Lo modela quien hace poco nació de la tierra

y pronto volverá a esa misma tierra de donde lo sacaron,

cuando le sea reclamada la vida recibida en préstamo.

9No piensa que la muerte le ronda y es efímera su existencia;

al contrario, compite con orfebres y plateros,

imita a los que trabajan en la forja del bronce

y cifra su orgullo en modelar lo que es falso.

10Vale menos que la ceniza su mente,

es más deleznable que el barro su esperanza

y se estima en menos su vida que la arcilla;

11porque no conoce al Dios que lo formó,

a quien le infundió un espíritu de vida.

12Más aún, toma la existencia como un juego

y piensa que la vida es una feria donde negociar;

por eso dice: “Hasta del mal hay que sacar partido”.

13Sabe, en efecto, mejor que nadie, que está pecando

cuando se entrega a fabricar de materia terrena

tanto frágiles vasijas como imágenes idolátricas.

La insensata idolatría de los egipcios

14Pero los más insensatos de todos,

más desgraciados incluso que la vida de un niño,

fueron los enemigos que oprimieron a tu pueblo.

15Consideraron, en efecto, como dioses

a todos los ídolos paganos:

esos cuyos ojos no les sirven para ver,

ni la nariz para respirar,

ni los oídos para escuchar,

ni los dedos de sus manos para tocar,

ni sus torpes pies para caminar.

16Porque fue un ser humano quien los fabricó,

los modeló alguien que tiene el espíritu prestado;

y nadie puede modelar un dios semejante a sí mismo.

17Siendo él mismo mortal, sus manos pecadoras

solamente pueden fabricar algo muerto.

Vale mucho más él que los objetos que adora,

pues él tiene vida; ellos, en cambio, no la tendrán jamás.

18Incluso rindieron culto a los más repugnantes animales,

capaces de superar en estupidez a todos los demás;

19eran animales sin la seductora belleza de otros seres,

excluidos, por tanto, de la aprobación y la bendición divinas.

Blog
About Us
Message
Site Map

Who We AreWhat We EelieveWhat We Do

Terms of UsePrivacy Notice

2025 by iamachristian.org,Inc All rights reserved.

Home
Gospel
Question
Blog
Help