1Cuando los seres humanos comenzaron a multiplicarse sobre la tierra y tuvieron hijas,
2los hijos de Dios, viendo que las hijas de los seres humanos eran hermosas, tomaron como mujeres a todas las que quisieron.
3Entonces el Señor dijo:
— No voy a permitir que mi aliento de vida esté en el ser humano para siempre, porque él no es más que un simple mortal. Así que la duración de su vida será de ciento veinte años.
4En aquellos tiempos —cuando los hijos de Dios se unieron con las hijas de los seres humanos y tuvieron descendencia con ellas—, e incluso después, habitaban la tierra gigantes. Ellos fueron los famosos héroes de los tiempos antiguos.
5Y viendo el Señor que la maldad del ser humano crecía sin medida y que todos sus pensamientos tendían constantemente al mal,
6le pesó haber creado al ser humano sobre la tierra. Entonces, con dolor de corazón, de alto.
16La harás de tres pisos y pondrás una sobrecubierta medio metro por encima de la parte superior del arca. En uno de sus costados pondrás una puerta.
17Porque voy a enviar a la tierra un diluvio de agua que destruirá todo lo que tiene vida bajo el cielo. Todo cuanto existe en la tierra perecerá.
18Pero contigo estableceré mi alianza. Entrarás en el arca tú con tus tres hijos, tu mujer y tus nueras.
19Haz entrar también en el arca una pareja de cada especie de seres vivos, macho y hembra, para que sobrevivan contigo.
20De cada especie de aves, de ganados y de reptiles de la tierra, entrará contigo una pareja, para que puedan sobrevivir.
21Aprovisiónate además de toda clase de alimentos y almacénalos, para que tanto tú como ellos dispongan de comida.
22Y Noé hizo exactamente todo lo que Dios le había ordenado.
Who We AreWhat We EelieveWhat We Do
2025 by iamachristian.org,Inc All rights reserved.