Efesios 5 - Biblia Reina Valera 1909

1SED, Mt. 5.45,48.pues, imitadores de Dios como hijos amados:

2Y andad en amor, Jn. 13.34.como también Cristo nos amó, y se entregó á sí mismo por nosotros, He. 7.27.ofrenda y sacrificio á Dios en olor suave.

3Pero Col. 3.5.fornicación y toda inmundicia, ó avaricia, ni aun se nombre entre vosotros, como conviene á santos;

4Ni Col. 3.8.palabras torpes, ni necedades, ni truhanerías, que no convienen; sino antes bien acciones de gracias.

5Porque sabéis esto, que ningún fornicario, ó inmundo, ó avaro, Col. 3.5.que es servidor de ídolos, He. 12.14.tiene herencia en el reino de Cristo y de Dios.

6Nadie os engañe con palabras vanas; porque Col. 3.6.por estas cosas viene la ira de Dios cp. 2.2.sobre los hijos de desobediencia.

7No seáis pues aparceros con ellos;

8Porque en otro tiempo cp. 2.11,12.erais tinieblas; mas ahora Jn. 8.12.sois luz en el Señor: andad como Lc. 16.8.hijos de luz,

9(Porque Ga. 5.22.el fruto del Espíritu es en toda bondad, y justicia, y verdad;)

10Aprobando Ro. 12.2.lo que es agradable al Señor.

11Y no comuniquéis con Ro. 6.21 y 13.12.las obras infructuosas de las tinieblas; sino antes bien redargüidlas.

12Porque Ro. 1.26.torpe cosa es aun hablar de lo que ellos hacen en oculto.

13Mas todas las cosas cuando son redargüidas, son manifestadas por la luz; porque lo que manifiesta todo, la luz es.

14Por lo cual dice: Ro. 13.11.Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo.

15Mirad, Col. 4.5.pues, cómo andéis avisadamente; no como necios, mas como sabios;

16Redimiendo el tiempo, porque los días son malos.

17Por tanto, no seáis imprudentes, Ro. 12.2.sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.

18Y Ro. 13.13.no os embriaguéis de vino, en lo cual hay disolución; mas sed llenos de Espíritu;

1 Deberes domésticos.2 La armadura de Dios.

19Hablando entre vosotros Col. 3.16.con salmos, y con himnos, y canciones espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones;

20Dando gracias siempre Col. 3.17. 1 Ts. 1.2. 2 Ts. 1.3.de todo al Col. 1.12.Dios y Padre He. 13.15. 1 P. 2.5 y 4.11.en el nombre de nuestro Señor Jesucristo:

21Sujetados los unos á los otros en el temor de Dios.

22Las casadas Col. 3.18—4.1.estén sujetas á sus propios maridos, cp. 6.5.como al Señor.

23Porque el marido 1 Co. 11.3.es cabeza de la mujer, así como cp. 1.22,23.Cristo es cabeza de la iglesia; y él es el que da la salud al cuerpo.

24Así que, como la iglesia está sujeta á Cristo, así también las casadas lo estén á sus maridos en todo.

25Maridos, Col. 3.19. 1 P. 3.7.amad á vuestras mujeres, así como Cristo amó á la iglesia, y ver. 2se entregó á sí mismo por ella,

26Para santificarla limpiándola Tit. 3.5. 1 P. 3.21.en el lavacro del agua Mt. 28.19.por la palabra,

27Para presentársela Col. 1.22.gloriosa para sí, una iglesia que Cnt. 4.7.no tuviese mancha ni arruga, ni cosa semejante; cp. 1.4.sino que fuese santa y sin mancha.

28Así también los maridos deben amar á sus mujeres como á sus mismos cuerpos. El que ama á su mujer, á sí mismo se ama.

29Porque ninguno aborreció jamás á su propia carne, antes la sustenta y regala, como también Cristo á la iglesia;

30Porque 1 Co. 6.15 y 12.27.somos miembros de su cuerpo, de su carne y de sus huesos.

31Por esto Gn. 2.24.dejará el hombre á su padre y á su madre, y se allegará á su mujer, y serán dos en una carne.

32Este misterio grande es: mas yo digo esto con respecto á Cristo y á la iglesia.

33Cada uno Col. 3.19.empero de vosotros de por sí, ame también á su mujer como á sí mismo; y la mujer 1 P. 3.6.reverencie á su marido.